Mecanizado Por Arranque De Viruta

El mecanizado por arranque de viruta es un proceso fundamental en la industria del metal. Consiste en la eliminación de material de una pieza mediante el uso de herramientas de corte, generando virutas en forma de pequeños trozos. Este proceso se utiliza para crear piezas con formas específicas y exactas dentro de los estándares de tolerancia establecidos.

El objetivo principal del mecanizado por arranque de viruta es obtener una pieza con la forma deseada y a medida, a través de la eliminación de material en exceso. Esto se logra mediante el uso de diferentes técnicas de corte, como el fresado, torneado, taladrado, rectificado, entre otras.

El fresado es una técnica muy común en el mecanizado por arranque de viruta. Consiste en la rotación de una herramienta de corte con múltiples filos para realizar el corte en la pieza. Este proceso permite la obtención de superficies planas, curvas y de diferentes formas, proporcionando gran precisión en la conformación de la pieza.

Por otro lado, el torneado es utilizado para obtener piezas de revolución, como cilindros, conos o esferas. En este proceso, la herramienta de corte se desplaza longitudinalmente, mientras la pieza gira sobre su propio eje. Esto permite crear piezas con alta precisión y acabado superficial.

Es crucial seguir todas las instrucciones y protocolos establecidos durante el mecanizado por arranque de viruta. Cualquier error puede afectar la calidad de la pieza final y generar rechazos en la producción. Además, es importante contar con herramientas y maquinaria adecuada, así como con personal capacitado en el manejo de estas técnicas.

Principales ventajas del mecanizado por arranque de viruta:

• Mayor precisión dimensional.
• Mejor acabado superficial.
• Posibilidad de mecanizar diferentes materiales.
• Flexibilidad en la creación de formas y geometrías complejas.

Conclusión

El mecanizado por arranque de viruta es una técnica esencial en la industria del metal, permitiendo la creación de piezas precisas y de alta calidad. Es fundamental seguir las instrucciones y protocolos establecidos para garantizar resultados óptimos. Con el uso adecuado de herramientas de corte y maquinaria, así como personal capacitado, este proceso se convierte en una herramienta indispensable en la producción de piezas metálicas.